El viento es aire en movimiento con dirección, sentido e intensidad. Se trata de una variable meteorológica que permite que tengamos ambientes cálidos, secos, frescos o húmedos, según provenga de zonas continentales o marítimas. Cuando la velocidad del viento se encuentra entre los 39 y 49 km/h se consideran vientos fuertes.
Las tormentas son fenómenos meteorológicos que se caracterizan por la presencia de dos o más masas de aire de distintas temperaturas. Este contraste de temperaturas hace que la atmósfera pierda estabilidad, causando vientos, lluvias, relámpagos, truenos y, en ocasiones, granizo.
¿Qué hacer antes, durante y después de las tormentas?
Antes
- Respetar indicaciones de las autoridades locales.
- Prestar atención a la información meteorológica local.
- Permanecer en lugares seguros.
- Alejarse de ventanas, tragaluces y puertas de vidrio.
- Conocer los lugares de evacuación y sitios elevados de tu localidad.
- Mantener en buenas condiciones árboles y arbustos cercanos a viviendas.
- Evitar sacar la basura.
- Prevenir la obstrucción de caños y cañerías.
- Preparar la mochila de emergencias.
Durante
- Respetar indicaciones de autoridades locales.
- Evitar actividades al aire libre y circular en calles inundadas o afectadas.
- Utilizar radios a pilas para informarse.
- No realizar llamadas telefónicas para no colapsar las líneas. Priorizar mensajes de texto o whatsapp.
- Desconectar aparatos eléctricos para evitar la caída de rayos.
- Cerrar ventanas y puertas exteriores con seguridad.
- No tocar metal o superficies conductoras de electricidad.
- Suspender el suministro eléctrico si hay filtraciones de agua.
- Alejarse de las zonas costeras y ribereñas y evitar sumergirse en espejos de agua.
- En caso de estar manejando, estacionar en la banquina y esperar dentro del vehículo.
- Refugiarse en lugares seguros, lejos de árboles y postes de electricidad.
¡Importante! Notificar a organismos locales de emergencias en caso de haber sufrido daños.
Después
- Respetar indicaciones de las autoridades locales.
- Alejarse de zonas afectadas por la tormenta.
- Obtener información actualizada para verificar si hay zonas bloqueadas.
- Ayudar a quienes necesiten asistencia como bebés, personas mayores y/o personas con discapacidad.
Si una persona es alcanzada por un rayo:
- Pedir ayuda al 1-0-7, 9-1-1 o número local de emergencias. Revisar posibles quemaduras o lesiones.
- Si no respira, llamar al 1-0-7 y realizar RCP.
- En estos casos siempre se requiere atención médica profesional. Las personas no retienen carga eléctrica y pueden ser atendidas de manera segura.
A través de su Dirección Nacional de Gestión del Riesgo de Emergencias y Desastres, Cruz Roja Argentina trabaja con el objetivo de fortalecer la resiliencia y la capacidad de respuesta de las comunidades para reducir el riesgo y el impacto de las emergencias.
¿Te gustaría recibir nuestras novedades por correo electrónico? Completá el formulario haciendo clic acá y conocé más acerca de nuestra misión humanitaria.