4 consejos para obtener una longevidad saludable
La vejez es una etapa de la vida que como cualquier otra presenta desafíos y oportunidades específicas. Es muy positivo informarse y estar conectados con el bienestar para acceder a la calidad de vida que deseamos. Además, las personas mayores son elementos fundamentales para sus familias, amistades y comunidades, por eso es importante que sigan aprendiendo y desarrollando capacidades de autocuidado para seguir contribuyendo personal y socialmente. Para ello, compartimos algunos consejos útiles:
1. Actividades sociales
Las personas pueden tener una mejor calidad de vida realizando planes sencillos como ir a un centro comunitario, club o al cine, pintar mandalas, hacer jardinería, o jugar a las cartas.
Las actividades sociales y la sensación de productividad reducen los efectos del estrés en el cuerpo y ayudan a las personas a mantenerse involucradas y activas en la comunidad.
2. Alimentación saludable
La incorporación diaria de frutas y verduras brinda a nuestro cuerpo los nutrientes necesarios para mantenerse sano y fuerte. Reducir el consumo de sal, azúcar, alimentos ultraprocesados es clave para mantener hábitos saludables.
¡El agua también es muy importante! Se aconseja consumir al menos 2 litros o entre 6 y 8 vasos de agua para mantenerse hidratado/a.
Efectos cuando dejamos de fumar tabaco
En 20 minutos el ritmo cardíaco y la presión arterial disminuye a niveles normales. En 12 horas mejora el oxígeno en el cuerpo. En días mejora el olfato, gusto y piel. En 2 semanas la función pulmonar mejora. En 9 semanas se reduce el riesgo de infecciones pulmonares. Al año, el riesgo de enfermedad cardiovascular se reduce a la mitad. A los cinco años, el riesgo de derrame cerebral, cáncer bucal y de cáncer cérvico-uterino en las mujeres baja a la mitad. A los diez años, el riesgo de cáncer pulmonar y de cáncer pancreático se reduce. |
Dejar de fumar es beneficioso para personas de todas las edades, aún si presentan afecciones de salud relacionadas al tabaco. ¡Nunca es demasiado tarde!
3. Actividad física
Hacer deporte, caminar o simplemente moverse todos los días mantiene al cuerpo saludable y mejor preparado para combatir enfermedades. De esta manera, nuestros músculos, articulaciones, huesos y tendones permanecen activos y funcionando en todo su potencial, lo que permite estar más fuertes y con mayor energía.
4. Aprendizaje permanente
Mantener la mente activa es un factor clave para el envejecimiento saludable. Aprender permite adquirir y actualizar información y habilidades. Así, el cerebro se vuelve más flexible, fuerte y construye nuevas conexiones que podrían significar una mejoría en la sensibilidad, cognición, memoria y habilidades motrices ¡Nunca es tarde!
Las personas que incorporan una alimentación saludable, espacios de socialización y la práctica regular de ejercicio tienen menor probabilidad de desarrollar enfermedades crónicas como la diabetes, enfermedades cardiovasculares, osteoporosis, entre otras. |
Recomendaciones para prevenir caídas
Perder el equilibrio, tropezarse y caerse son unos de los mayores temores que tienen las personas mayores. Existen distintas medidas preventivas que se pueden tomar para volver los espacios más seguros:
- Mantener el orden
- Mantener una iluminación adecuada
- Incorporar barras de apoyo en espacios clave como ducha o bañera.
Además, la realización de actividad física y las revisiones médicas son fundamentales para prevenir caídas.
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